El post de hoy viene con banda sonora cortesía de los Hombres G, porque vamos a hablar de ¡pelo!
Pocas cosas hay más sensuales que un pelo con swing. Por algo los Hombres G pedían a gritos que la chica se soltase el pelo, porque ese movimiento ondulante que hacen las melenas con cuerpo, sobre todo las de las adolescentes, es muy evocador. Primero, el pelo y «luego, si quieres, el sujetador» (Hombres G dixit). Vamos, que para ellos nada como un buen melenón. Y nosotras aquí preocupadas, porque se nos cae el pecho cuando lo más sexy está en nuestras cabezas (¡sobre todo en el interior!).
Tanto nos gusta a las mujeres (y a los hombres) el pelo con movimiento que laboratorios, como los de L’Oréal (y en concreto los de Kérastase) tienen una tecnología (que también se utiliza en las películas de animación) que mide si su pelo hace el movimiento perfecto tras aplicar sus productos. Y es que una melena con cuerpo y con «swing» resulta muy atractiva.
Pues de esto me acordaba yo el otro día en el gimnasio (así de profundo es a veces mi pensamiento) mientras veía cómo una chica se secaba el pelo. Y no pude resistirme, tuve que decirle algo, porque me daba dolor de corazón comprobar cómo maltrataba su melena cepillo y secador en mano. Sentía cierto apuro, por si le parecía una intromisión, pero no pude aguantarme. Es como cuando estoy en la playa, hay veces que tengo que reprimir las ganas de echarle la crema al vecino, porque sé que se va a quemar o de confiscar cremas solares y aceites sin SPF o con índices de protección solar mínimos…
Pero volvamos al pelo de la chica del gimnasio. Allí estaba ella, cepillando la melena con pasión, de un lado a otro, a tope de fricción, moviendo además el secador como si aquello fuese una samba. Craso error, como os contaba el otro día, muchos de los problemas de la piel y también del pelo comienzan en la ducha y con el styling.
Nuestra fibra capilar está recubierta por más de 100.000 escatimas, llamadas cutículas y que están colocadas como si fuesen las tejas de un tejado. Si estas «tejas» están planas/lisas la luz al incidir se refleja, si no es así, si están levantadas y unas miran para Murcia y otras para Badajoz, la luz se dispersa. Por eso, a los niños les brilla tanto el pelo, porque su «tejado» está perfecto.
El abuso de herramientas de calor, los tintes, etc hacen que esas escatimas no estén lisas y, también la falta de hidratación, los brushings agresivos, etc. Resultado: el pelo no brilla.
Aunque ya nunca más tendremos la melena de nuestra adolescencia, porque con los años perdemos estrógenos (de nuevo las hormonas) y esto se traduce en una disminución del tamaño del folículo y en una fibra capilar más fina, hay pequeños gestos cotidianos que pueden arruinar nuestras melenas. Así que si quieres tener un pelo con swing toma nota de estos ocho consejos:
Nunca utilices cepillos de metal, porque como explica Romy de la peluquería New Look, «opta mejor por los de madera porque los de aluminio provocan que el agua en el interior del pelo hierva y se rompa la fibra capilar«. Recuerda que el agua hierve a los 100 grados centígrados y hay planchas y secadores que logran una temperatura superior a los 180. Yo siempre uso los de pala (el de Marlies Möller es mi favorito. Es caro pero tiene más de diez años y he visto que en el Corte Inglés tiene un 20% de descuento), porque con una sola pasada coges más cantidad de pelo (así hay menos fricción). Las puntas quedan un pelín más disparadas que con un cepillo redondo, pero se arregla con un golpe de plancha.
Las puntas en su día fueron las raíces así que imagínate lo que han visto en el viaje (tintes, planchas, brushings, etc). El pelo crece una media de un centímetro al mes. Por lo tanto, para llegar a la altura de los hombros habrán pasado unos tres años. Conclusión: si quieres una melena lustrosa córtate el pelo y no sólo las puntas. Una punta abierta no son varios milímetros puede llegar hasta la mitad del cabello. Pero ojo, NO es verdad que el pelo crezca más rápido o más sano por cortarlo. El grosor de tu pelo lo determinan tus genes. Si quieres evitar las puntas abiertas no sometas a tu pelo a ningún tipo de tratamiento químico y utiliza siempre acondicionador.
¿Tienes el pelo graso? Como explica la Dra. Aurora Guerra, Jefa de Sección Dermatología Hospital 12 Octubre Madrid y miembro de la AEDV, «la grasa no desaparece ni disminuye con los champús ya que se rige por impulsos hormonales. Solamente se consigue una mayor limpieza y mejor aspecto con los champús antigrasa que con otros, en estos casos».
Otro tip: el sebo que produce tu cuero cabelludo no se extiende por todo el cabello por arte de magia, lo mueves tú con tus propios dedos cada vez que te tocas el pelo. El simple hecho de pasar los dedos por el cabello hace que transfieras las grasa a otras zonas. Así que las manos lejos de cara y pelo… I am watching you 🙂
Hay que cambiar de champú porque el pelo se acostumbra. Otra leyenda urbana como el champú de biotina. Como explica la Dra Guerra «no existe acostumbramiento al mismo. Lo que ocurre es que la mejoría inicial, no es tan llamativa con el uso continuado. Recuerda que «los champús de tratamiento requieren después de la primera aplicación, una segunda en la que se deje actuar el producto sobre el cuero cabelludo de 5 a 7 minutos. Así se permite que alcance mejor su objetivo», asegura la experta.
Cepillar con entusiasmo para desenredar cuando el pelo está húmedo puede ser tan dañino como secar el pelo a 220 grados. Nunca utilices cepillos de metal. Yo prefiero los de madera de púas anchas para desenredar. No tires del cabello y hazlo con suavidad.
Porque las siliconas no son siempre las malas de la película y lo dice alguien que es fan de la cosmética natural pero en el caso del cabello uso productos acondicionadores que contienen dimeticona (un tipo de silicona que proviene del silicio) y que protege la cutícula del cabello, tanto en seco como en mojado. Para hidratar también me gusta el aceite de argán. Muchas veces lo aplico en seco (menos en el cuero cabelludo), recojo el pelo en una cola de caballo y me voy a correr. Así me aseguro que tengo el producto en el pelo por lo menos una hora. Luego aclaro y lavo en la ducha.
Cuando te laves el pelo distribuye el champú y no lleves las puntas hacia la coronilla para frotar porque sólo consigues entredar el cabello.
Y después de estos tips ya podéis hacer bien un swing de pelo como Heidi Klum en este anuncio. Hoy más de uno se queda pegado al sofá… o no.
Os recuerdo que en la pestaña de pelo tenéis un montón de post sobre cabello, cómo usar las planchas, disimular un mal corte de pelo o los nuevos champús en aceite.
El jueves más y mejor 🙂
Enhorabuena Cris por este artículo. Me ha encantado, y muy útil para mí… Ya que yo pertenezco a la categoría de ‘Pelo Fosco’. Yo te quería plantear… no se si es de tu competencia o no… el tema de las uñas quebradizas. Podrías escribir un post sobre ello. Me vendría genial… Cuido mi alimentación, intento tomar proteínas etc. En casa lo hago todo con guantes.. aun así.. casi todas las semanas «me falla» alguna uña… ¿Consejos? ¿Es mejor pintar la uña para protegerla o, por el contrario, al pintarla se debilita? Es mi eterna duda. Gracias de antemano. Un abrazo. Y sigue asi!!!!
Hola Cristina!
Una cosita, he visto lo que decías de la plancha y yo he pedido una para mi cumple este año, había pedido una GHD que me ha recomendado mi amiga Dori . ¿Es un error? es posible que la utilice bastante y como ya me tiño no quiero destrozarme más el pelo ¿Qué me recomiendas?
Muchas gracias!!
Cris,
Y pensar que fue gracias a ti y a Eva C. que descubrí Marlies Möller! Ya no puedo vivir sin el cepillo!
Mil gracias por tu post!
Besos
Me encanta el post de hoy. Tengo el pelo muy graso y es horrible porque a eso también le sumo lo fino que lo tengo, remedios no hay para este tipo de cabello…
Oh, buenos consejos; tomo nota…
Me encanto!! Genial el post…y ya se unhas cuantas cosas q voy a cambiar je. Gracias