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Resoluciones de año nuevo

Entre mazapán y mazapán, me he parado a pensar en mi manifiesto para el 2013. Mis deseos para el año nuevo y también mi lista de deberes. En definitiva, todas esas promesas que me hago a mí misma y que espero poder cumplir. Cuando llegue marzo, revisaré este post para ver si estoy haciendo bien los deberes y a ver si me puedo premiar con un par de Gallifantes. Hoy me gustaría decirlos en alto y compartirlos con todos vosotros.

Seguir viendo el vaso medio lleno Aunque soy positiva por naturaleza, hay veces que cuesta ver la luz al final del túnel. Hay días que se tuercen, que las cosas no salen como una espera y, como a mí me puede mi impaciencia, tendré que respirar profundo y contar quizá hasta 20.

Al 2013 sólo le pido salud y energía para seguir disfrutando. Fuerza en las piernas para seguir corriendo y alegría en los dedos para dar con brío a la tecla, y así poder contaros todas mis aventuras runners y mis mejores consejos de belleza.

Ver la vida en #colorinos, porque aunque el día sea un poco gris, corre de nuestra parte darle un toque de color. ¡Sonreír, afortunadamente, sigue siendo gratis!

Ser más solidaria No se trata de hacer aportaciones a Cáritas o Cruz Roja (que también está muy bien y hoy es más necesario que nunca), pero muchas veces nos olvidamos de los que tenemos a menos de un metro. Menos yo-mí-me-conmigo y practicar más él-ella-lo-la-si-se-consigo!

Escuchar más y hablar menos Si eres Leo como yo, lo sabes bien.

Dejar el móvil en el bolso y prestar atención Prometo no whatsapear, ni fisgar el mail, el Facebook y el Twitter cuando esté con las personas que de verdad me importan. Y ésta me va costar cumplirla, porque es difícil teniendo en cuenta que tengo tres cuentas de e-mail, dos de Twitter y Facebook y un Instagram. ¡Y el día tiene 24 horas!

Seguir disfrutando No olvidar nunca que vida sólo hay una. ¡Y yo pienso exprimirla al máximo!

«You can always reach higher» Como dicen los ingleses y que suena mejor, y más inspirador, que nuestro «ir un poco más allá». Eso me diré a mí misma cuando esté a punto de tirar la toalla. Porque no hay más límite que el que uno quiera ponerse y, como dice el anuncio de Asics: «Estoy hecha de una fuerza que ni sabía que tenía». ¿Quién dijo no puedo?

Aprender de los errores y ser humilde Si mi «Sagrarín» me enseñó la importancia de ir siempre «limpina y fresquina» (en el sentido más amplio de ambas palabras) a mi padre le debo esta gran verdad que, a día de hoy, todavía me repite. Aquí lo dejo por escrito para no olvidarlo.

Y ya un último deseo: poder seguir desayunando con vosotros todos los martes y los jueves. Porque las tostadas y el cafetín no sabrían igual si no pudiese compartirlos con los que estáis al otro lado. Stay tuned!

Por cierto, muchísimas gracias a Marisitas que me ha enviado estas dos muñecas runners por Navidad. Son lo más. ¡Si tienen hasta flequillo como yo y van a todo color! De corazón, gracias. ¡Menudo detallazo!

Un beso fuerte a tod@s, aunque sea virtual.

 

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Cristina Mitre