Mis nuevas barras de labios ATDP «A tope de Power», en colaboración con MIA Cosmetics porque ante la duda píntate los labios.
Teníamos todo preparado para lanzar esta colaboración en marzo, pero el coronavirus me impidió viajar a Madrid para presentarla. Luego, con la declaración del estado de alarma y todo lo que vino después no era el momento de hablar de maquillaje.
Y, aunque la situación en España sigue siendo delicada, creo que, ahora, es cuando más necesitamos una inyección de buen rollo y un poquito de power.
Barras de labios para subir el ánimo
Siempre he creído que la barra de labios es ese cosmético esencial que consigue no solo ponerte mejor cara, también, levantarte el ánimo. En estos días de confinamiento, ha habido tres cosas que me han puesto de buen humor por las mañanas: echarme una crema hidratante de cuerpo rica (mi favorita crema de cuerpo de nata de Benamor), ponerme Viva la vida de Coldplay a todo volumen y pintarme los labios. De hecho, la barra de labios es el único producto de maquillaje que he usado a diario.
Sí, para estar en casa y grabar podcast que es lo único que he hecho durante los últimos 50 días. Porque verme bien me ha hecho sentirme mejor.
Esta colección de barras de labios ATDP «A tope de power», en colaboración con MIA Cosmetics se declina en cuatro tonos: borgoña, coral, rosa y rojo. Son los cuatro tonos que más utilizo habitualmente y los he creado en exclusiva con MIA Cosmetics.
Mis cuatro tonos: coral, rojo, rojo y borgoña
A lo largo de estos meses, me habéis preguntado muchas, muchas veces qué barra de labios llevaba en mis fotos, stories y directos y siempre os respondía lo mismo: «está descatalogada», pero la verdad es que llevaba puesto alguno de los cuatro tonos de mi colección pero no podía contarlo… hasta hoy.
Hay un tono para todo el mundo y están pensados, incluso, para poder combinarse entre sí a lo largo del día. De hecho, hay días que arranco con el rosa y termino con los labios pintados de rojo.
Fórmula hidratante y resistente
La fórmula es muy hidratante, gracias a la manteca de karité y monoi, el aceite de argán y los glicéridos de soja. El acabado es mate y, aunque no es de larga duración, el pigmento es tan rico que dura y dura. Apta para veganos y sin gluten. Se vende en farmacias (consulta puntos de venta aquí) y en la propia web de MIA Cosmetics.
En la imagen llevo el tono Borgoña ATDP
En la imagen llevo el tono Coral ATDP
En la imagen llevo el tono Rosa ATDP
En la imagen llevo el tono Rojo ATDP
Si os interesa la historia del maquillaje y, en particular la de la barra de labios, no podéis dejar de leer el libro Face Paint de la conocida maquilladora británica Lisa Eldridge. En él, Eldridge hace un homenaje al rouge y explica cómo la forma más primitiva de rojo de labios eran unos sticks a base de pigmento de ocre rojo, que se conseguían al mezclar óxido de hierro con grasas animales o vegetales, muy similares en cuanto a formato a las sombras en barra actuales.
Historia (breve) del rouge
En la corte francesa de Louis XV, su amante, Madame de Pompadour, acuñó su propio rouge el «rosa Pompadour» que usaba tanto para maquillar labios como mejillas. De hecho, maquillarse en público era el día a día en la corte y formaba parte de la Toilette que tan famosa hizo María Antonietta.
En 1780, el rouge se pone a la venta en las perfumerías francesas y, a finales del siglo XVIII, los rouges vegetales se hicieron más populares, gracias a un tipo de carmín conocido como Spanish wool (lana española). Se trataba de un trozo de tela que se teñía con carmín de quermes.
Era lo más parecido a unos pads o almohadillas actuales, de unos cuatro centímetros y que podían aplicarse sobre mejillas y labios. Luego, se creó una segunda versión en papel, conocida como «Spanish paper». En 1850, la producción de cosméticos se convierte en industria, con su epicentro en la ciudad de París.
Maquillaje revolucionario
En 1933, en su Book of Beauty (libro de la belleza), la revista Vogue declaraba que pintarse los labios era uno de los gestos más importantes del siglo. A pesar de todo, para las mujeres de la época utilizar barra de labios era moralmente cuestionable, porque estaba asociado a prostitutas y actrices. Y aunque era un gesto de lo más revolucionario resultaba poco práctico, porque la barra de labios tal y como la conocemos ahora, en un estuche de metal, no se fabricó hasta 1915 y hasta 1925 no apareció la barra de labios en tubo.
Durante la Segunda Guerra Mundial, se animaba a las mujeres a que se pintasen los labios de rojo brillante para mantener la moral alta y, de hecho, la producción de barras de labios se consideró como una de las industrias esenciales: el rojo se convierte en una marca patriótica. En 1942, el US War Production Board (la junta de producción de guerra de los Estados Unidos) consideró que la fabricación de barras de labios era «necesario y vital».
Sin duda, 1950 fue la época dorada de las barras de labios, como tan bien recrea la serie de televisión Mad Men en este capítulo. Entre los esenciales de las mujeres estaban las barras de labios y las polveras, que se mostraban en púbico para hacer retoques.
El ocaso y el revivir de la barra de labios
Y, así, la barra de labios llega hasta nuestros días, pero en los años 90 la irrupción del lipgloss la eclipsó. Sin embargo, afortunadamente, en los últimos años «ha recuperado su status y el foco se pone en el ritual y en el lujo atemporal que encierra una barra de labios», escribe Eldridge. Y no puedo estar más de acuerdo. No es solo el color, es el gestual que acompaña a la aplicación.
Por eso, en esta esta colección de barras de labios ATDP «A tope de power», en colaboración con MIA Cosmetics, el packaing era tan importante: desde el diseño de la caja, donde os envío un pequeño mensaje, hasta el propio aplicador, en blanco mate, de tacto suave y que ¡pesa! Parece una tontería, pero esto le da más cuerpo a la barra y permite una aplicación más precisa.
Los expositores que encontrareis en las farmacias con los cuatro tonos de la colección ATDP A tope de power de Cristina Mitre para MIA Cosmetics.
La colección ATDP A tope de power de CRostina Mitre para MIA Cosmetics se vende en farmacias (consulta puntos de venta aquí) y en la propia web de MIA Cosmetics. 16,95 €.
Ante la duda, píntate lo labios, porque no podemos cambiar el mundo pero sí la actitud con la que nos enfrentamos a los nuevos retos. ¡A tope de power!
Fotos: MIA Cosmetics y Aitor López Audicana.