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Vencer el miedo

Auténtico pánico. Eso es lo que sentía cada vez que me paraba a pensar que en las vacaciones iba a bucear. Confieso que más de una noche en Madrid me desvelé pensado en que en breve me iba a sumergir en el fondo del mar. Era un miedo visceral e incomprensible. Ese «no puedo, de verdad, que no puedo». Tenía la misma sensación que cuando retomé el esquí y al ponerme las botas me daban ganas de vomitar. Todo muy escatológico, lo sé.

Lo más fácil hubiese sido rendirme, tirar la toalla y asumir que no podía, pero no soy así. Me da mucha rabia dejar de hacer algo por miedo. Y, aunque reconozco que esto de bucear es más un actor de amor (y casi de fe), estoy contenta de haber trascendido a mi propio temor. Tengo que darle las gracias a Clara. Allí estaba ella una vez dándome esos ánimos que a mí me faltaban.

Si no hubiese buceado, no habría visto esta tortuga

¡Mirad qué cerca estaba!

No me voy a poner en plan experta, porque de este tema no controlo, pero creo que el mejor consejo que os puedo dar para evitar malas experiencias es que os pongáis en manos expertas.

Para bucear es necesario estar certificado. Yo saqué el PADI (uno de los organismos que te acreditan) con Bubbles Dive. Y no puedo dejar de recomendarles. Raúl, mi instructor, es un buceador muy experto, que además tiene una paciencia infinita con histéricas, como la que escribe estas líneas. Más de una vez, durante el bautizo en la piscina, estuve por quitarme las aletas y él logró lo que creía imposible. ¡No dudéis en contactarle!

El buceo puede ser muy relajante o una experiencia muy estresante, así que elige sólo profesionales que te den confianza y no te cortes en admitir tus miedos. Y pregunta siempre todas las dudas que te surjan.

Los cursos de refresco. En España no son obligatorios, pero para mí fueron fundamentales. Había sacado el título hacía dos años y cuando fui a las clases teóricas no me acordaba ni de las señalas, ni de cómo se montaba el equipo. Es fácil olvidar las cosas básicas. Además, meterte en la piscina y recordar cómo sacar el agua de las gafas o quitar y poner el regulador bajo el agua nunca está de más y mejora la confianza en ti misma. Doy fe.

El equipo puede parecer muy aparatoso, como cuando empiezas a esquiar, pero luego realmente son cuatro cosas las que hay que comprobar y una vez que estás en el agua, te sientes súper ligera.

Y cómo no, siempre os tengo reservada alguna recomendación beauty. Si llevas ortodoncia tipo Invisalign, como es mi caso, no bucees con ella, por la presión y porque es difícil morder el regulador. Respecto al pelo, mejor recogido en una coleta baja y bien de horquillas para tener la cara bien despejada de pelos inoportunos. Por cierto, ¡las de H&M no se oxidan!

Mission accomplished. En las próximas vacaciones más. En la foto llevo bañador azul klein de Decathlon y gafas de Spektre

Espero que os haya gustado. Ya sabéis que podéis seguirnos en Twitter o en nuestra página de Facebook. Stay tuned!

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13 comentarios
  • Qué miedito… yo sería incapaz…bueno, pienso que igual que tu..si me presionaran… jajajaj…Pq yo creía que jamás podría volver a subir en las atracciones hasta que en eurodisney tuve que acompañar a mi hija….y subía a todas!!!
    Enhorabuena!! eres un modelo de actividad andante…
    Una cosita…pusiste…»cuya toceduz agradezco»… creo que fue una errata…pq es «tozudez» … jajjaja… BESITOS!!!

  • Hola
    Me llamo Carla y tengo un directorio web. Me ha encantado tu blog! Tienes unos post muy guapos de belleza, te felicito!!. Buen trabajo, por ello me encantaría contar con tu sitio en mi directorio, para que mis visitantes entren a tu web y obtengas mayor tráfico.
    Si estás de acuerdo házmelo saber.
    PD: mi email es: mendezcarla90@gmail.com
    Carla.

  • Qué valiente!!Tuvo que ser una experiencia alucinante, pero a mí la inmensidad del mar me sigue dando mucho respeto.Lo máximo que he hecho ha sido coger una barquita de pedales y tirarme desde el tobogán para niños que tienen y aún así luego lo pensaba en casa y me entraba ansiedad!jaja.

    En cuanto al post anterior…una lástima haberlo leído tras volver de la playa porque vaya show este año. Recientemente me he hecho un moldeado pero mi pelo es muy muy liso, así que al salir del agua me quedaba «ni liso ni rizao´» y como no tengo mucho, me salían unas calvas espantosas. En fin, una auténtica tragedia capilar. Las fotos son para quemarlas en la hoguera!Y lo peor es que luego ves a las famosas en las revistas saliendo del agua con el pelo perfecto y te preguntas: «pero qué he hecho mal, Dios mío!!»jaja. Un beso, buceadora,

  • Qué pasada de fotos, qué cara de felicidad tienes…pero no, el buceo no es para mí (eso creo) Solo de pensarlo me falta el aire así que, de momento, sigo con mis inicios de running y tus consejos en eso. Para Amén le diré que yo hago unos 20-25 minutos, estoy empezando, creo que son unos cuatro kilómetros, más o menos, así que mucho ánimo porque, como ves, no eres la única. Besos a las dos!

  • ¡Muy buenas!

    Lo de «mañana desayunamos» yo me lo tomé al pie de la letra y me metí en tu blog a eso de las 10am para ver qué nos esperaba, jajaja.

    Yo me «bauticé» este verano y la verdad es que a mí la experiencia no me fascinó. Lo hice porque sentía curiosidad y fue un regalo, pero me pasa como en los aviones, con la presión en los oídos lo paso FATAL y para mí fue un agobio… Creo que es una buena advertencia para las que os pase lo mismo y queráis probar con el submarinismo… Además sí me resulto muy aparatoso el equipo… Por otro lado, es un deporte completo y con el que puedes ver infinidad de cosas y de criaturas que desde la tierra te pierdes! Así que a sopesar pros y contras.

    Por último, Cristina, te quería preguntar, si no te importa decirlo, cuánto corrías las primeras veces que ibas a correr, estoy empezando a entrenar con más fuerza y me agobia pensar cuánto tiempo tardaré en hacer la marca que quiero, y mi novio bien que me dice «te crees que todos el primer día corrían 7 kms…» jejeje, muchas gracias y enhorabuena de nuevo por tu blog (¡vaya parrafada!).

    • Hola!

      Sorry como estoy de vas desayuné más tarde! Ojalá que la espera haya merecido la pena!
      Respecto al running, take it easy! Todo llega. No te obsesiones con los kilómetros. Cada día que corras ponte una meta:un minuto más, unos metros y, sobre todo, termina con ganas de más para que no te desinfles. Los cambios de ritmo te irán muy bien para ir cogiendo más fondo. Yo empecé corriendo 20 minutos que me parecían eternos, ahora los rodajes no suelen bajar de 45 minutos/una hora. Como en todo: poco a poco! Gracias por seguirnos!

      • Muchísimas gracias por tu rápida contestación, esto hace que te sigamos con más ansias y el blog sea más dinámico, se agradece. La verdad es que sí mereció la pena «la espera» :p y me habéis dado muchas energías para seguir. Pasado mañana empiezan mis «vacassssss!!» 🙂

  • ENHORABUENA!! Se de lo que hablas porque el titulo me lo saque hace 7 años, y cuando metí la cabeza por primera vez en la piscina con el equipo, me salí histérica diciendo que yo eso no lo hacia (mi novio de aquel entonces, mi marido, que es dive master fue al que se le ocurrió la genial idea de animarme) . Gracias a su paciencia y a la de los instructores, conseguí hacer mi primera inmersión en piscina y desde entonces no he parado; teniendo el placer de bucear con mantas gigantes en indonesia, con tiburones en Sudáfrica, y con pulpos, gambas y caballitos de mar en Canarias. Ahora toca el cabo de Creus en Gerona!!!

  • Hola, Cris
    ¡que envidia sana me has dado!!! Es una de las cosas que quiero hacer desde hace años y, en cuanto pueda, me quito la espinita, sobre todo viéndote tan feliz junto a esa tortuga. Tomo nota del centro que dices, seguro que está fenomenal.
    Y si, tienes razón en que hay que enfrentar los miedos ¡y si es por un acto de amor, como has hecho tu, la recompensa es doble!
    besazos

    Raquel

  • Cris, ¡que envidia me has dado!!!! Es una de las cosas que quiero hacer, de hecho llevo dándole vueltas varios años y en cuanto pueda me voy a quitar la espinita ¡y más viéndote tan feliz debajo del agua, con esa tortuga!
    Y si, totalmente de acuerdo contigo en que hay que enfrentar los miedos ¡y si es por un acto de amor, la recompensa es doble!
    besazos

  • buufff…pues yo lo he intentado y es una sensación tan claustrofóbica que no he podido hacerlo!!!! encima me iba grande el chaleco, me caía la botella a la cabeza, un show, me reí mucho, pero lo que es bucear poco!!! a ver si alguna vez lo puedo hacer decentemente ejjeje un beso

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Cristina Mitre